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Para alcanzar una sonrisa de ensueño, es primordial darles un buen cuidado a tus dientes. Pese a que algunas personas tienen a su favor a la genética, esta por sí sola no hará que tus dientes luzcan bien para siempre. Es primordial mantener una buena higiene oral con los años.
Alcanza una buena salud oral con los siguientes consejos ofrecidos por varios especialistas.
Cepíllate los dientes
Para prevenir caries y otras problemas bucales, debes cepillarte los dientes al menos dos veces al día; idealmente en la mañana y en la noche. También debes usar hilo dental al menos una vez al día, en la noche antes de acostarse, y utilizar algún tipo de enjuague bucal para finalizar la limpieza.
Selecciona un buen cepillo
El cepillo también es importante y se recomienda que sea de hebras suaves, de mango recto y cabezal redondeado, en caso de ser manual. La razón por la que es importante que el cepillo tenga los filamentos suaves es para que su uso no gaste el esmalte de nuestros dientes, recalcó el doctor Antonio Soto Singala, dentista y catedrático de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Ciencias Médicas. El desgaste del esmalte puede provocar sensibilidad bucal.
En cuanto a la pasta…
Seleccionar la pasta de dientes correcta también ayuda a que tus dientes se mantengan fuertes y saludables. Para los que tienen sensibilidad bucal, el doctor Soto Singala recomienda utilizar una pasta que contenga nitrato de potasio.
Asimismo, hay que evitar el uso de las pastas blanqueadoras, que tienen mucho contenido abrasivo y dañan los dientes y la mucosa de la boca. “Son pastas de uso excepcional, indicada por el dentista”, dice la doctora Carelia Berger, docente de la Universidad Finis Terrae.
Conoce bien la técnica
A la hora de cepillarte los dientes, es esencial que lo hagas con suavidad y no de lado a lado. De acuerdo con el doctor Soto Singala, la técnica correcta es mover el cepillo de forma circular de arriba a abajo.
Ojo en dónde lo pones
La doctora Marilyn Ward, odontóloga de la Universidad de Texas, aconseja que el cepillo debe dejarse en forma vertical y al aire, sin usar tapas de protección que provoquen humedad y bacterias. Con solo dejar el cepillo con acceso al aire, se elimina la mayoría de las bacterias que causan enfermedad en las encías. Lo mejor, además, es que el cepillo no entre en contacto con otros, así que evita ponerlo en vasos con otros cepillos. Recuerda cambiarlo cada tres meses.
Antes del desayuno…
Respecto de estos hábitos de higiene, hay estudios que asocian un cepillado al levantarse antes de desayunar, con menos acidez y menos problemas de reflujo. Esto se debe a que en la noche crece la placa bacteriana y el aseo la elimina. Así, al desayunar, los gérmenes no pasan al estómago.
Fuente: Primera Hora
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