¿Qué son los implantes dentales?
Son unas raíces artificiales de titanio clínicamente puro (un material con un excelente grado de biocompatibilidad con el organismo) que se colocan en el hueso mandibular o maxilar con el fin de crear una base sólida para restaurar dientes individuales o prótesis parciales o totales.
Desde un punto de vista funcional, los implantes dentales son exactamente iguales que nuestros dientes naturales por lo que nos permiten masticar con
total comodidad, sonreír, hablar y, en definitiva, sentir la misma seguridad que con nuestra propia dentadura.
¿Qué beneficios tiene la colocación de un implante dental?
1. Disminuir las sobrecargas de las piezas restantes
Al ir perdiendo piezas dentarias, las restantes tienen que soportar todas las fuerzas de la masticación, sufriendo una importante sobrecarga, por tanto, viendo acortada su vida útil. Con los implantes no sólo reponemos los dientes que hemos perdido a nivel estético sino también a nivel funcional.
2. Frenar la reabsorción ósea (pérdida de hueso)
Cuando perdemos una o varias piezas dentarias se inicia un proceso de reabsorción o pérdida ósea que, en muchos casos, se ve acelerado por la presión de las prótesis removibles (de quita y pon). Al implantar las raíces artificiales se frena también la reabsorción ósea, cuyas consecuencias funcionales y estéticas pueden llegar a ser dramáticas.
3. Regenerar gracias al PRGF®-ENDORET®: Plasma rico en factores de crecimiento
El uso del PRGF®-Endoret®, proporciona una cantidad de proteínas en el lugar de acción que aumentan la capacidad de regeneración del hueso perdido durante años, así como la reparación de tejidos después de una cirugía.
4. Mejorar la función dental
Poder sustituir las dentaduras removibles (de quita y pon) por dientes fijos, mejorando la función y la estética de nuestra sonrisa. Reponer piezas dentales sin necesidad de tocar los dientes naturales, permitiéndonos masticar, sonreír y hablar con total normalidad.
5. Mejorar la estética
Las prótesis dentales, fijadas sobre los implantes, tienen misma forma, color y tamaño a los dientes propios. Su gran ventaja radica en que el resultado final es totalmente natural, no se ven como piezas artificiales, y los pacientes con implantes pueden reír y hablar con toda normalidad.
6. Soluciones BTI
Los problemas en implantología aparecen por la falta de hueso o bien en altura o bien en anchura.
La diversidad de diámetros y longitudes de los implantes dentales de BTI ofrecen soluciones a todos estos problemas.
Preguntas frecuentes
Sí. Lo primero que debes hacer es asesorarte bien con tu dentista para saber de qué se trata exactamente tu problema. Te hará un diagnóstico completo de tu boca para saber si eres o no, un candidato adecuado para la colocación de implantes. Siempre que tengas cantidad y calidad de hueso suficiente y tu estado de
salud general sea bueno está indicada su colocación.
A la hora de colocar un implante, el profesional es el que debe realizar los estudios necesarios para evaluar si se dan las condiciones adecuadas de calidad y cantidad de hueso maxilar, así como revisar el estado general del paciente.
Sólo en casos de pacientes, con condiciones especiales como: cáncer, diabetes no controladas, pacientes psiquiátricos, jóvenes sin finalizar su desarrollo, embarazadas y fumadores estaría contraindicado la colocación de implantes.
No. A pesar del miedo ancestral al dentista, hoy en día la población en general es consciente de que el dentista no hace daño. Aunque no es menos cierto que acudir a nuestras consultas no es lo más divertido que vayamos a hacer ese día. Un tratamiento de implantes exige una pequeña intervención quirúrgica, pero las molestias
que esto puede ocasionar se pueden controlar perfectamente. Por lo general, dichas molestias no van a ser más que las producidas por la extracción de una muela.
El concepto de oseointegración es el opuesto al rechazo. Por lo tanto, podemos decir que el rechazo, utilizando la técnica y los materiales que describimos, no existe.
Podría suceder que perdiéramos alguno de los implantes colocados, por infecciones, sobrecarga prematura de los implantes, mala calidad ósea o por algunas otras causas más infrecuentes aún. Precisamente para evitarlo es por lo que estos tratamientos se deben realizar por un especialista cualificado que controle perfectamente todos estos parámetros. El tabaco es una causa común e importante de fracaso de un tratamiento con implantes dentales ya que perjudica gravemente la salud de sus dientes.
Los tratamientos con implantes están en constante evolución. El tiempo tradicional de oseointegración de 3 o 4 meses en la mandíbula y de 4 a 6 meses en el maxilar se pueden acortar en algunas situaciones especiales. De manera que si tenemos un hueso de buena calidad y una buena estabilidad inicial en algunos casos estamos realizando lo que denominamos carga inmediata o dientes en un día.
Podemos colocar unos dientes provisionales el mismo día o al día siguiente y luego transcurrido el tiempo tradicional de oseointegración, se realiza la prótesis definitiva. Pero será su especialista el que, en cada caso, te indicará cuál es tu mejor opción.
Lo que diferencia a los implantes de BTI de otros que se encuentran en el mercado es que estos son fruto de una constante labor de investigación y desarrollo gracias a su prestigioso equipo de investigadores y colaboradores a nivel internacional que repercute directamente en la continua mejora e innovación de sus productos.